lunes, 7 de septiembre de 2015

Primeras impresiones

No sé si tenía pocas expectativas de la ciudad o prácticamente no esperaba encontrarme nada sorprendente de una ciudad tan poco conocida y de la que no había oído hablar antes de que me dieran plaza en Erasmus, pero lo cierto es que Burdeos me ha sorprendido mucho y, evidentemente, para bien. Es una ciudad bonita, con un aire a París en algunas calles, pero me recuerda sobre todo a Milán.

La zona donde vivo es exactamente como me la esperaba (es lo que tiene el ser tan impaciente y recorrerla a cada momento por Google Maps). Cuando llegué me encontré lo que ya había descubierto por Internet: edificios con residencias alrededor, prácticamente ningún restaurante o supermercado cerca (para encontrar alguno hay que ir unas cuantas paradas en el tranvía), varios parques, pocos coches, estudiantes... En fin, poco misterio en este aspecto. El apartamento donde estoy alojado es un T5, en la residencia Pierre Gilles de Gennes. Está bastante bien, sólo que aquí falta literalmente de todo: no hay microondas, ni mantas, ni almohada, ni lavadora, ni sofá, ni televisión, ni nada. Menos mal que, por lo menos, hay cama! No he tenido más remedio que pasar la tarde de ayer en el Ikea, pero bueno, es lo que hay.  En unas horas conoceré al propietario (o propietaria) del apartamento, así que ya veremos qué nos dice a mi compañera y a mi. Por ahora sólo estamos ella y yo en el apartamento; todavía quedan dos personas para que ocupen las dos habitaciones que quedan (qué ilusión por saber quiénes serán! :D).

En fin, que esto es un pequeño "caos". No sólo por eso, sino por todos los papeles que hay que rellenar; después me tengo que hacer una cuenta bancaria francesa, comprarme una tarjeta de móvil francés, etc. 

Apenas he tenido tiempo de visitar nada, pero por lo menos tuve ayer un par de horas por la mañana y me dio tiempo a ver una parte de Burdeos. Eché algunas fotos para que las veáis!


Foto del amanecer desde el avión. El río que se ve es el Garona, que atraviesa Burdeos.




Esto fue en uno de los parques del centro de Burdeos, donde había una exhibición de coches antiguos.



La famosa Place de la Bourse, con el minicharquito tan característico que refleja los monumentos de alrededor. Fue difícil poder sacar una foto en la que no saliera nadie mojándose los pies (tuve que esperar un rato...).


Esta estatua la encontré paseando por uno de los parques. Es de un filósofo que se llama Michel de Montaigne. Creo que era de Burdeos o algo así. Le eché una foto porque este filósofo es el que da nombre a mi facultad, Montaigne.


Una tienda de Bagels en la calle Sainte Cathérine. La calle, que dicen que es la más larga de Europa, es increíble. Hay, literalmente, de todo: muchos restaurantes, cafeterías, tiendas... Me recuerda a la calle Larios en Málaga, sólo que multiplicada en longitud.


Otra perspectiva de la ciudad reflejada en el charco de la Place de la Bourse.


El también conocido Pont de Pierre.



La columna de la Place de Quinconces.


No recuerdo cómo se llamaba este monumento, la verdad. xd Ya lo averiguaré.


Cerca de la Catedral de Saint Michel había como un mercadillo donde vendían pastas caseras, mermelada, pasteles, cafés, ostras (según parece, aquí se comen mucho)... Éstas son algunas fotos del mercado.


Y esta es la Catedral de Saint Michel. No he visitado ningún monumento todavía, pero espero entrar en las catedrales y los museos pronto, parecen muy interesantes!


Bueno, por ahora esto es todo. Espero volver a escribir pronto y subir más fotos. De todas formas, seguiré subiendo fotos a diario seguramente en Instagram, así que si me seguís ahí podréis ver más de Burdeos (en @josephjeps). :) À bientôt!

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